En un universo paralelo se llevaba a cabo cada veinticuatro
de diciembre el concurso denominado el
regalo de papá Noel, los concursantes seleccionados tendrán que competir entre
ellos para obtener el premio final. La Hamingja
era la guardiana
de vigilar que las normas del
concurso no se rompieran, cualquier
concursante que infringiere alguna sería eliminado.
El juego comenzaba
cuando los ocho participantes se presentarán en la mansión Blood que se
encontraba alejada de la ciudad. Cada uno contenía ocho dijes que simbolizaban
animales diferentes con una
cualidad distinta. Para poder adquirir dicho amuleto tenían que obtener el
corazón de su contrincante.
Al entrar a la mansión
observe a tres personas, la primera
era una mujer de pelo castaño que al entrar también volcó su mira hacia mí. La segunda
persona era una mujer de edad avanzada que se encontraba sentada en un sillón y
la última persona fue un hombre con una mirada desquiciada, pelo corto y complexión
delgada que se encontraba descansando sentado en el suelo.
Una explosión resonó en la parte exterior de la mansión,
dos mujeres elegantes aparecieron al abrirse la puerta. Unas de ellas tenían en
su mano un corazón mientras la otra se limpia la sangre de sus manos con un pañuelo. La última persona
que faltaba apareció todos quedaron
asombrados al ver una chica ciega.
Sin duda las dos
mujeres que tenían el corazón se unieron en una alianza. Entonces la chica
ciega hablo.
—¡Hola, me llamo Lulú! Se que todos entramos para obtener el regalo de papa
Noel. ¿Pero es necesario matarnos?
La anciana se levantó y comentó.
—Las alianzas en este juego no funcionaran cada uno
persigue un sueño que cumplir, ¿renunciarían a su anhelo?
El hombre sentado se levantó para decir que aceptaba la alianza de la
chica. Las miradas furtivas de los concursantes se hicieron
evidentes.
La guardiana se materializo.
— ¡Vaya! Observó que solo quedan siete participantes en el juego. Les deseo suerte a todos. Sin duda las habilidades de
cada uno de ustedes los pondrán a prueba.
Al desaparecer
una explosión se hizo presente los concursantes aprovecharon
para resguardarse y planear sus
estrategias. La anciana salió de los escombros sin percatarse de la mujer de pelo
castaño. La primera batalla comenzó Amuleto Armadillo vs Hiena.
—¡Vaya! Será fácil
obtener el primer amuleto. Solo tengo que desarme de esta anciana.
La mujer corrió hacia su enemigo para atacar con dos dagas que poseía. Pero su
trayecto fue interrumpido por dos abanicos
que desvió con sus armas.
—Haz sido estúpida al
querer enfrentarte a mi querida.
—¿Quién eres vieja del demonio? — gritó furiosa.
—¡Soy Klara! La anciana que te matara. Ja, ja
La chica Hiena se abalanzó
sobre ella, la agilidad que demostraba era impresionante. Pero la
anciana con sus abanicos no se
quedaba atrás. La mano izquierda paso
rosando enfrente de su cara mientras que la derecha seguía el mismo ritmo. Los
abanicos eran lanzados como proyectil al ser de metal.
La habilidad del amuleto Hiena, fue activado varias dagas
fueron lanzadas al mismo tiempo a la anciana mientras ella activa la
habilidad del amuleto Armadillo, una coraza la rodeo. Nuevos abanicos fueron
lanzados sin dar en su objetivo.
Un tercer contrincante se unió a la batalla al lanzar una
lluvia de agujas metálicas, que dejó
fuera de combate a la chica de pelo castaño. La anciana se mantenía protegida
en su coraza buscando al enemigo. Una
segunda lluvia de agujas apareció
sin efecto alguno.
—Esconderte en tu
caparazón no te servirá. ¿Cuánta
energía te quedara? — dijo el chico de la mirada desquiciada.
—Terminare con este patético juego.
—A caso no buscas lo mismo que todos. ¡Poder!
—Solo busco terminar lo que nunca debió empezar.
La anciana miro el cuerpo
de la chica. Se apresuró a conseguir el amuleto. Pero antes de agarrarlo desvió dos agujas que le causaron
unos rasguños. El amuleto Alacrán se activó.
Las armas servían para
conducir el veneno que en instantes
termino con la vida de ella.
El ganador de la batalla se acercó.
—¡Me llamo, Elmo!
Se acercó al cuerpo de cada una de las contrincantes para
obtener sus medallones.
Las dos mujeres que hicieron una alianza obtuvieron el amuleto Camaleón y Víbora. Rocío Contaba con el amuleto Camaleón y Medusa mientras que Clarisa poseía el amuleto Víbora y Zorro.
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