El niño con el pijama de rayas - John Boyne

De padre alemán y madre francesa, Pierrot ha tenido una infancia no muy distinta de la de cualquier niño de su época. Sin embargo, nos hallamos en París, corre el año 1935 y la guerra que se avecina trastocará el destino de millones de personas. Tras la muerte prematura de sus padres, Pierrot deberá separarse de su íntimo amigo Anshel y abandonar Francia para vivir con su tía Beatrix, que trabaja de ama de llaves en una mansión imponente erigida en lo alto de una montaña. Pero no es una casa cualquiera; se trata nada menos que del Berghof, la enorme residencia que Adolf Hitler posee en los Alpes de Baviera.

Así, a sus siete años, alojado de manera involuntaria en el entorno íntimo del todopoderoso Führer, Pierrot se verá inmerso en un mundo tan extrañamente seductor como peligroso. En él no hay lugar para la inocencia, y cuando al final de la guerra es capturado por los aliados, Pieter —como ahora se llama— llevará un peso insoportable en su conciencia. A su regreso a París, abrumado por la culpa, un aspecto clave de la historia surgirá como una tabla de salvación, y el inesperado desenlace será una muestra más de la insondable dimensión del perdón y la amistad.
En esta ocasión les hable del libro "EL NIÑO CON LA PIJAMA DE RAYAS" de John Boyne.La primera vez que leí la historia de Bruno; hasta ahora no encuentro la respuesta correcta del paradero donde fue aparar con su amigo Shmuel.

Enfocándonos un poco en la historia, nos encontramos con el pequeño Bruno y su familia que viven en Berlín, pero un día al padre de Bruno le ofrecen un puesto mayor en Auchviz.Donde se mudaron; al principio para Gretel, Bruno y Madre el cambio les costaba un poco más aceptar. Mientras avanza la historia un poco más; Bruno conoce al teniente Kotler donde sale y entra de su casa como alguien más de la familia, la forma de dirigirse a las personas de mala manera hace que Bruno no lo soporte.

En varias circunstancias de la historia Bruno conoce a personas respetosas y amables que le ayudan a recuperar el ánimo para poder seguir en aquel lugar.

Después de terminar sus actividades, Bruno juega al explorador fuera de su nueva casa, llegando hasta la muralla que había visto por la ventana de su habitación; al visualizar se encuentra con un niño llamado Shmuel.

Con el paso del tiempo Shmuel y Bruno se hicieron amigos, al terminas sus deberes Bruno va a la muralla a visitar a su nuevo amigo, llevando casi siempre un poco de comida.
Siempre estaba cuestionándose, porque aquellas personas vestían con pijama de rayas y de que forma se divertían. Pero al preguntarle a su padre nunca lo tomo en consideración siendo el hijo de un comandante.

Al finalizar la historia Shmuel y Bruno entran al campo de concentración a buscar al papa de Shmuel, pero en un instante los soldados hacen que ciertas personas entren al trasporte donde ellos quedan dentro. ¿Pero es inevitable saber que fue lo que en realidad le paso al pequeño Shmuel y Bruno?

La gran moraleja de esta historia seria para el padre de Bruno, no hagas a los demás lo que no quieras que le hagan a tus seres queridos.


¡Recordando que las lecciones más doloras; son las que aprendes cuando estas vivo!
 
¡BUENO!




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